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Que fue el campeón del pueblo no lo duda nadie a estas alturas, ni dentro ni fuera de la WWE. Que dejó una gran muesca en la historia de la empresa y en general en el mundo del wrestling tampoco es algo que nadie pueda rebatir, y que ha sido una de las grandes estrellas y uno de los grandes campeones que han pasado por ese ring será el orgullo que habrá de lucir durante el resto de su vida. Durante muchos años fue el gran héroe de la WWE y de todo el universo que lo sigue y el espejo en que reflejarse de much@s luchadores y divas de la época y de la actualidad.

Pero Dwayne Douglas Jonson dejó de ser The Rock en 2002 cuando tomó la decisión personal de elegir entre el mundo de la lucha y el mundo del cine, cambiando las cámaras del ring por las cámaras del Hollywood. En aquel momento The Rock pasó a ser El Rey Escorpión y aunque en la WWE se seguía manteniendo “virtualmente” al luchador en “nómina” con la venta de sus productos y la explotación de su imagen, lo cierto es que el ya actor desapareció (con alguna intervención muy puntual y no como luchador) durante más de siete años del mundo de la lucha para centrarse en su nueva faceta.

Aquellos comienzos en el cine fueron realmente buenos en cuanto a éxito de las películas en las que participaba, y por ende, en el aumento de su ya muy alta popularidad, y por supuesto, en el número de ceros a la derecha en sus cuentas bancarias (de hecho fue Record Guinness por ser el actor que más dinero ha ganado en  su primer papel en cine: 5 millones de dólares por “el retorno de la Momia”) y todo esto fue en aumento durante el 2003 y el 2004. Pero como en la vida de todo aquel que no siendo agraciado con el talento para una profesión, sigue insistiendo en ello una y otra vez… su carrera cinematográfica (que no su cuenta bancaria) entró en fase de estancamiento con producciones ridículas en papeles absurdos (“papá por sorpresa”) y otras sin ningún éxito relevante en taquilla a pesar de explotar el rol de héroe “musculitos” (“rompedientes” o “sed de venganza”). Y de la fase de estancamiento pasó a la fase de caída con mucho riesgo de ser caída en picado. Su popularidad, antaño reconocida y estimada, empezaba a tambalearse. Los papeles y los guiones buenos no llegaban, la cuenta del banco estancada y el intento de aumentar su tirón participando en programas de público juvenil no convencían (“Hannah Montana” o “los Magos de Waverly Place” entre otros). Corría el peligro de que la estrella se apagara.

Y llegamos al año 2011 y su aparición, no como actor protagonista pero si en un rol muy “face”, en una película de mucho tirón mediático y popular, amén de ser una saga muy rentable. La quinta película de “Fast & Furious” que contaba además con el retorno protagonista del actor que las dio fama mundial (Vin Diesel, que aparte de parecer un clon en lo físico de quien nos ocupa, merecería otro artículo por ser su carrera cinematográfica otro calco de la de Dwayne en todos los sentidos). Tanto los productores de la cinta como el equipo de marketing como el propio actor, sabían que se la estaban jugando con esta apuesta y que necesitaban sacar un verdadero As de la manga para, por un lado asegurar el éxito de la película y por otro relanzar la carrera en cine de Jonson y asegurar así futuros proyectos suyos.

¿Y cual fue ese As? Pues si, lo que tod@s estamos pensado y recordando… ¿Dónde tuvo mayor éxito y popularidad antes del cine?… Dwayne Douglas Jonson volvió a actuar, que no a ser, como el personaje que más fama mundial le ha dado. El 14 de Febrero de 2011 volvió The Rock al universo WWE vía McMahon, iniciando así su feudo con Cena. El icono de antaño contra el icono actual. Una lucha en el tiempo de proporciones bíblicas que a nadie ha dejado indiferente y que ha hecho que el universo wwe vuelva a desgañitarse y quedarse afónico cada vez que aparece en directo o por video en alguno de los programas de la empresa.

Por supuesto la película fue el gran éxito que se esperaba, recaudó muchísimo dinero por todo el mundo y la fama y la popularidad volvieron a brillar sobre las gafas de sol de nuestra estrella.

Pero, y aquí viene el tema principal que intentaba plantear con el título del artículo, a pesar de su fama, de los aplausos, de la electricidad, de la conexión con la gente, de los followers que le siguen, de las ventas que produce…. ¿The Rock sigue siendo el gran Héroe que nos fascinó a finales de los 90 y principios del 2000 o se ha convertido en un Villano hipercreido que utiliza a la WWE y a sus fans para conseguir otros objetivos personales?

Se que esto no va a caer bien a mucha gente, pero personalmente me inclino por la segunda opción. No voy a negar la calidad indiscutible que tiene como luchador, por su experiencia, por su físico, por el micro, por la conexión… pero a pesar de todo, The Rock no ha vuelto para quedarse. Ha vuelto para hacer negocio, para su negocio.

Viendo el éxito que tuvo Fast & Furious 5 y la conexión con su retorno al ring, el aún actor no ha dudado en seguir explotando ambas vertientes de manera conectada y así durante el 2012 mantuvo abiertos los dos caminos, estrenado con papel protagonista y con mucho éxito la cinta en 3D “Viaje al centro de la Tierra2” a la vez que continuaba su feudo con Cena que culminó con el combate estelar de WM28 ganando y prometiendo al día siguiente en RAW que volvería a por el campeonato de la WWE.

El problema de todo esto, de tanta vida social, grabaciones, promociones y programas, es que al final no dedicas el debido tiempo ni a una cosa ni a otra. Y de esto se dio cuenta él y su círculo y nos dimos cuenta tod@s. Sus apariciones en directo en WWE eran contadas, muchas grabaciones y algunos diferidos hacían que el malestar entre el resto de luchadores fuera latente primero y palpable después, con algunas manifestaciones públicas por parte de alguno de ellos, y con toda la razón del mundo, pues si la gran mayoría de la plantilla de WWE se partía el lomo con grabaciones casi diarias,  House Show semanales, viajes agotadores por todo el mundo y algunos incluso compaginando todo esto también con grabaciones de películas, The Rock seguía manteniendo su status de ME sin apenas aparecer ni luchar y solo hablando (y grabado) mientras mantenía toda su agenda cinematográfica.

Es por ello que después del RAW posterior a WM28 se decidió que The Rock dejara de “provocar y calentar” a todo el roster con este tipo de pseudo apariciones y por lo tanto se cambió la forma de hacer sus aportaciones a la empresa. Con el reto lanzado, The Rock ya solo volvió para el episodio 1000 de RAW en donde anunció que en Royal Rumble de 2013 lucharía por el título de la WWE.

Pero con toda la fama y la popularidad de nuevo a cuestas, el otra vez Dwayne Douglas Jonson dedicó la mayoría del 2012 a grabar todos los proyectos de cine que tenía sobre la mesa, que no eran pocos. De nuevo el actor volvió a utilizar la WWE para su beneficio personal y cuando tuvo bastante, desapareció.

Una vez terminado el 2012 y con todas las películas grabadas, nos encontramos un 2013 un tanto curioso. The Rock ha vuelto a aparecer el pasado 7 de Enero en RAW y se ha confirmado al menos 8 apariciones en distintos programas de aquí a WM29, sin contar su participación en dicho PPV  además de RR y Elimination Chamber. Todo esto lo tiene que compaginar con las promociones de las cinco películas en las que ha participado y que va a estrenar de aquí hasta el 10 de junio  (“Snitch”, “GI Joe 2”, “Pain and Gain”, Fast & Furious 6” y “Empire State”) y además está la posibilidad de que en RR salga como campeón, lo que conlleva que sus apariciones posteriores sean siempre físicas ya que no se concibe un Campeón en un RTWM donde no esté presente.

Sin duda un papel complicado, para el, todavía, actor y para la WWE. Personalmente creo, y repito que lo considero un grandísimo luchador, que para esto no debería haber vuelto. O se vuelve al 100% y para todo o se vuelve con contrato de leyenda, pero ahora mismo en la empresa hay grandes talentos a jornada completa que con buenas historias y mejores feudos pueden dar enormes ME y combates memorables sin necesidad de recurrir a The Rock para levantar al público y las ventas. Y más cuando ha demostrado el porqué de su vuelta al ring. Que nadie espere volver a verlo después de WM29 aparte de alguna cosa esporádica, tiene la agenda llena de grabaciones que es lo que de verdad le importa. Muy a nuestro pesar, creo que después de ese PPV no le veremos más hasta después de mucho tiempo, quizá un próximo HOF…

Total, si la WWE ha sobrevivido algo más de siete años sin él, supongo que podrá hacerlo otros 7 o 14, ¿no?